Cuando éramos chiquitos nuestros padres, abuelos, tíos y todo adulto que hayamos tenido al lado, nos cantaban canciones que quedaron grabadas en nuestras memorias y que incluso hoy nos descubrimos tarareando alguna vez. Hoy quiero analizar con ustedes algunas de las que más recuerdo. Los invito, entonces, a viajar hacia atrás en el tiempo, donde las canciones infantiles tenían contenidos dignos de ser escuchados y difundidos. Vamos entonces...
1) Empezamos con una soft: mensaje machista no muy bien disimulado
a) (...)Me arrodillo a los pies de mi amante,
me levanto constante, constante (...)
b) (...) con un pasito atrás, haciendo una reverencia (...)
Más claro, imposible. Así tiene que ser la mujer, sumisa, dócil, debe arrodillarse a los pies de su amante y levantarse cuando él lo ordene, sin olvidar hacer una reverencia. Todo, manteniendo la constancia. Hablando de mensajes subliminales. Quiero dejar algo clarísimo: el machismo isn't over!! Y el que se atreva a decirme feminista, se las va a tener que ver conmigo...
2) Falta de respeto hacia la tercera edad:
Que llueva, que llueva, la vieja está en la cueva
Los pajaritos cantan, la vieja se levanta...
Lo mejor de todo es que después te cagaban a pedo si te escuchaban decir "viejo" en público. Ahí ponían cara de "no sé de dónde saca este/a chico/a estas cosas" y se disculpaban con el blanco de la ofensa con algo del estilo de "le dije mil veces que diga señor/a, pero vio cómo vienen los chicos ahora..."
3) No sé muy bien cómo titular esto, pongámosle... leré:
Un cocherito, leré
me dijo anoche, leré
si yo quería, leré
pasear en coche, leré
Hasta el día de hoy no tengo la menor idea de qué es ese leré. No tengo mucho más para decir sobre esto. En realidad, dudo que se lo merezca.
4) Violencia familiar:
Todos los patitos se fueron a bañar
y el más chiquitito se quiso quedar
la mamá enojada le quiso pegar
y el pobre patito se puso a llorar.
Lo único que tranquiliza mi conciencia es que la mamá le quiso pegar, pero se ve que no lo logró, aunque el patito, inmensamente traumado, calculo yo, se largó a llorar. A Dios gracias por la Convención sobre los Derechos del Niño.
5) Zoofilia subliminal:
Qué felices viviremos
cuando vuelvas a mi lado
con sus quesos, con tus besos
los tres juntos, ¡qué ilusión!
Ponele que te crea que la vaca da leche merengada. Ponele que mate moscas con el rabo. Pero la última imagen que evoca la estrofa final no es linda. No es algo para cantarle a un chico. El que canta, la que vuelve y la vaca, los tres tienen que hacer terapia. Y no de grupo, ¡por favor!
6) Morbo en las canciones infantiles:
Pinocho (fragmentos)
a) (...) un cruel espantapájaros bandido
lo sorprendió dormido y lo atacó (...)
b) (...) llegó con su nariz hecha pedazos
y una pierna en tres partes astillada
y una lesión interna y delicada (...)
c) (...) al viejo cirujano llamaron con urgencia
y con su vieja ciencia, pronto lo remendó
pero dijo a los otros muñecos internados
todo esto será en vano, le falta el corazón (...)
c) (...) entonces llegó el Hada protectora
y viendo que Pinocho se moría
le puso un corazón de fantasía
y Pinocho sonriendo despertó.
Por si no eran suficientes el Cuco, el Hombre de la Bolsa y el monstruo que vivía abajo de la cama, encima venían y te cantaban sobre un espantapájaros que agarra al muñeco más bueno del planeta y lo hace bosta. Encima, lo agarra cuando está dormido. ¿Saben por qué no se canta más? Insomnio asegurado hasta los ocho años, posible incapacidad nocturna para retener líquidos y pesadillas entre Saw y Jeepers Creepers.
Y para enfatizar el efecto Crónica TV, no sólo relata cómo lo ataca el espantapájaros del mal (a traición y sobre seguro, con evidente alevosía), sino que especifica todas y cada una de las lesiones: la nariz hecha pedazos; la pierna, no en una, no en dos, sino en ¡tres! partes astilladas y una lesión interna y delicada que cuando avanza la canción, nos enteramos que es la ausencia del corazón, probablemente porque el espantapájaros se lo comió, para volver a ser humano. A todo esto, el cirujano lo remienda, pero le avisa a los otros muñecos internados que todo es en balde. Volviendo un poco para atrás, Dios nos libre de más canciones explicando por qué estaban internados los otros muñecos. Personalmente, me parece que todos tuvieron la mala suerte de vivir en la primavera nº 23. Un horror. Pero, para salvarnos del daño irremediable que nos podría haber causado la historia si concluía con la muerte del pobre Pinocho, viene el Hada y viendo que se moría (imagen hermosa, otra vez, para los chicos) le termina poniendo un corazón de fantasía, y él se despierta sonriendo, como si nada. Era más fácil inventar una canción donde Pinocho se la pasara sonriendo, obviando al Creeper y listo.
Mambrú (fragmentos)
a) La Navidad se pasa
chiribín chiribín chin-chin
la Navidad se pasa,
Mambrú no vuelve más
ah ah ah ah ah ah
Mambrú no vuelve más...
b) Mambrú se ha muerto en guerra
chiribín chiribín chin-chin
Mambrú se ha muerto en guerra
lo llevan a enterrar
ah ah ah ah ah ah
lo llevan a enterrar...
Todo arranca bien. Mambrú se va a la guerra chiribín, chiribín chin-chin, aunque no se sabe si vendrá para Pascua o para Navidad. Pasa Pascua, pasa Navidad y ¡pum!, sin anestesia, Mambrú no vuelve más. Pero no porque conoció a alguien allá en la guerra, se casaron y tuvieron hijos. No porque le gustó el lugar y decidió quedarse a vivir ahí. No, Mambrú se murió en la guerra y lo llevan a enterrar, todo esto sin aflojarle ni al chiribín chiribín chin-chin (?) ni al ah ah ah ah ah ah, que suena más a risa que a condolencia. Tengo que agregar que hace poco me enteré que Mambrú se moría, a esa parte no me la cantaban a mí. Probablemente porque sabían que no podría soportarlo, por lo menos no después de lo de Pinocho (tener en cuenta que el pobre Mambrú no tenía un Hada protectora...)
7) Identidad sexual:
(...) yo soy la viudita del barrio del rey
me quiero casar y no sé con quién
con ésta sí, con ésta no,
con esta señorita me caso yo.
1) Empezamos con una soft: mensaje machista no muy bien disimulado
a) (...)Me arrodillo a los pies de mi amante,
me levanto constante, constante (...)
b) (...) con un pasito atrás, haciendo una reverencia (...)
Más claro, imposible. Así tiene que ser la mujer, sumisa, dócil, debe arrodillarse a los pies de su amante y levantarse cuando él lo ordene, sin olvidar hacer una reverencia. Todo, manteniendo la constancia. Hablando de mensajes subliminales. Quiero dejar algo clarísimo: el machismo isn't over!! Y el que se atreva a decirme feminista, se las va a tener que ver conmigo...
2) Falta de respeto hacia la tercera edad:
Que llueva, que llueva, la vieja está en la cueva
Los pajaritos cantan, la vieja se levanta...
Lo mejor de todo es que después te cagaban a pedo si te escuchaban decir "viejo" en público. Ahí ponían cara de "no sé de dónde saca este/a chico/a estas cosas" y se disculpaban con el blanco de la ofensa con algo del estilo de "le dije mil veces que diga señor/a, pero vio cómo vienen los chicos ahora..."
3) No sé muy bien cómo titular esto, pongámosle... leré:
Un cocherito, leré
me dijo anoche, leré
si yo quería, leré
pasear en coche, leré
Hasta el día de hoy no tengo la menor idea de qué es ese leré. No tengo mucho más para decir sobre esto. En realidad, dudo que se lo merezca.
4) Violencia familiar:
Todos los patitos se fueron a bañar
y el más chiquitito se quiso quedar
la mamá enojada le quiso pegar
y el pobre patito se puso a llorar.
Lo único que tranquiliza mi conciencia es que la mamá le quiso pegar, pero se ve que no lo logró, aunque el patito, inmensamente traumado, calculo yo, se largó a llorar. A Dios gracias por la Convención sobre los Derechos del Niño.
5) Zoofilia subliminal:
Qué felices viviremos
cuando vuelvas a mi lado
con sus quesos, con tus besos
los tres juntos, ¡qué ilusión!
Ponele que te crea que la vaca da leche merengada. Ponele que mate moscas con el rabo. Pero la última imagen que evoca la estrofa final no es linda. No es algo para cantarle a un chico. El que canta, la que vuelve y la vaca, los tres tienen que hacer terapia. Y no de grupo, ¡por favor!
6) Morbo en las canciones infantiles:
Pinocho (fragmentos)
a) (...) un cruel espantapájaros bandido
lo sorprendió dormido y lo atacó (...)
b) (...) llegó con su nariz hecha pedazos
y una pierna en tres partes astillada
y una lesión interna y delicada (...)
c) (...) al viejo cirujano llamaron con urgencia
y con su vieja ciencia, pronto lo remendó
pero dijo a los otros muñecos internados
todo esto será en vano, le falta el corazón (...)
c) (...) entonces llegó el Hada protectora
y viendo que Pinocho se moría
le puso un corazón de fantasía
y Pinocho sonriendo despertó.
Por si no eran suficientes el Cuco, el Hombre de la Bolsa y el monstruo que vivía abajo de la cama, encima venían y te cantaban sobre un espantapájaros que agarra al muñeco más bueno del planeta y lo hace bosta. Encima, lo agarra cuando está dormido. ¿Saben por qué no se canta más? Insomnio asegurado hasta los ocho años, posible incapacidad nocturna para retener líquidos y pesadillas entre Saw y Jeepers Creepers.
Y para enfatizar el efecto Crónica TV, no sólo relata cómo lo ataca el espantapájaros del mal (a traición y sobre seguro, con evidente alevosía), sino que especifica todas y cada una de las lesiones: la nariz hecha pedazos; la pierna, no en una, no en dos, sino en ¡tres! partes astilladas y una lesión interna y delicada que cuando avanza la canción, nos enteramos que es la ausencia del corazón, probablemente porque el espantapájaros se lo comió, para volver a ser humano. A todo esto, el cirujano lo remienda, pero le avisa a los otros muñecos internados que todo es en balde. Volviendo un poco para atrás, Dios nos libre de más canciones explicando por qué estaban internados los otros muñecos. Personalmente, me parece que todos tuvieron la mala suerte de vivir en la primavera nº 23. Un horror. Pero, para salvarnos del daño irremediable que nos podría haber causado la historia si concluía con la muerte del pobre Pinocho, viene el Hada y viendo que se moría (imagen hermosa, otra vez, para los chicos) le termina poniendo un corazón de fantasía, y él se despierta sonriendo, como si nada. Era más fácil inventar una canción donde Pinocho se la pasara sonriendo, obviando al Creeper y listo.
Mambrú (fragmentos)
a) La Navidad se pasa
chiribín chiribín chin-chin
la Navidad se pasa,
Mambrú no vuelve más
ah ah ah ah ah ah
Mambrú no vuelve más...
b) Mambrú se ha muerto en guerra
chiribín chiribín chin-chin
Mambrú se ha muerto en guerra
lo llevan a enterrar
ah ah ah ah ah ah
lo llevan a enterrar...
Todo arranca bien. Mambrú se va a la guerra chiribín, chiribín chin-chin, aunque no se sabe si vendrá para Pascua o para Navidad. Pasa Pascua, pasa Navidad y ¡pum!, sin anestesia, Mambrú no vuelve más. Pero no porque conoció a alguien allá en la guerra, se casaron y tuvieron hijos. No porque le gustó el lugar y decidió quedarse a vivir ahí. No, Mambrú se murió en la guerra y lo llevan a enterrar, todo esto sin aflojarle ni al chiribín chiribín chin-chin (?) ni al ah ah ah ah ah ah, que suena más a risa que a condolencia. Tengo que agregar que hace poco me enteré que Mambrú se moría, a esa parte no me la cantaban a mí. Probablemente porque sabían que no podría soportarlo, por lo menos no después de lo de Pinocho (tener en cuenta que el pobre Mambrú no tenía un Hada protectora...)
7) Identidad sexual:
(...) yo soy la viudita del barrio del rey
me quiero casar y no sé con quién
con ésta sí, con ésta no,
con esta señorita me caso yo.
Lucha por la identidad sexual. La viudita, una adelantada: no sólo sale del closet en la Edad Media, sino que encima, anuncia su deseo de contraer nupcias con una determinada señorita. Aunque estoy imaginando que la historia no termina bien y las pasan a las dos por la guillotina. La intolerancia de aquellas épocas...
Aparte, pongo esta, con un mensaje antibullying (y mi preferida, de paso):
a) Era Rodolfo un reno
que tenía una nariz
roja como la grana
y de un brillo singular.
b) Todos sus compañeros
se reían sin parar
y nuestro buen amigo
triste y solo se quedó.
c) Pero Navidad llegó
Santa Claus bajó
y a Rodolfo lo eligió
por su singular nariz
d) Tirando del trineo
fue Rodolfo sensanción
y desde ese momento
toda burla se acabó.
Moraleja: los que se cagan de risa de la gente, generalmente terminan trabajando para sus "víctimas". Es mejor tener la nariz roja que nada que te haga sobresalir. Y seguro, que mañana vas a causar sensación en lo que sea que hagas. En dos palabras: Rodolfo rulezzzzzzz!!
Y no me acuerdo de ninguna más. Pero seguro que las hay. Después de rememorar estas bellas letras, estoy empezando a ver al Sapo Pepe con otros ojos...
¿Se acuerdan de alguna otra canción con algún mensaje (bueno o malo) escondido?
rodolfo rules :P
ResponderEliminarHas estado caminando por caminos sinuosos...pero tengo que coincidir con la de pinocho. La primera vez que mi vieja me la canto me puse mal. Pero mall eh!! Y me duro la angustia! Le agarre un cariño increible a ese muñeco pelotudo...Por otro lado, no soporto la cancion de rodolfo (ni me banco que se llame asi). Es el mismo rechazo que vos le tenes a pa-panamericano...
ResponderEliminarjajajajj sos una idola...nunca supe las letras enteras de las canciones...las acabo de conocer jajaj..y me mata tu analisis!!....q pasaría con la de manuelita eeeh????
ResponderEliminarAdulterio no faltó tampoco, no me acordaba bien de la letra y la busqué, jajaj!
ResponderEliminarSoy capitán,
soy capitán
de un barco Inglés (bis)
y en cada puerto
tengo una mujer.
La rubia es (bis)
fenomenal (bis)
y la morena (bis)
tampoco está mal. (bis)
Si alguna vez
me he de casar,
me casaré
con la que me guste más.
esta cancion esta seriamente mal, es deprimente y confusa, no da cantarsela a un chico:
ResponderEliminarEL SEÑOR DON GATO
Estaba el señor Don Gato
sentadito en su tejado
marramiau, miau, miau,
sentadito en su tejado. Ha recibido una carta
por si quiere ser casado,
marramiau, miau, miau, miau,
por si quiere ser casado.
Con una gatita blanca
sobrina de un gato pardo,
marramiau, miau, miau, miau,
sobrina de un gato pardo.
El gato por ir a verla
se ha caído del tejado,
marramiau, miau, miau, miau,
se ha caído del tejado.
Se ha roto seis costillas
el espinazo y el rabo,
marramiau, miau, miau, miau,
el espinazo y el rabo.
Ya lo llevan a enterrar
por la calle del pescado,
marramiau, miau, miau, miau,
por la calle del pescado.
Al olor de las sardinas
el gato ha resucitado,
marramiau, miau, miau, miau,
el gato ha resucitado.
Por eso dice la gente
siete vidas tiene un gato,
marramiau, miau, miau, miau,
siete vidas tiene un gato
- "Arroz con leche me quiero casar, con una señorita de San Nicolás"
ResponderEliminarLo cantábamos las nenas... y nos queríamos casar con una SEÑORITA?
- "Que sepa tejer, que sepa bordar, que sepa abrir la puerta para ir a jugar"
Nuevamente la sumisión: quedate en casa vos, tejé, bordá y cuidá a los pibes... y que ese sea todo tu conocimiento, que no "sepas" otra cosa.
- "A la media noche me puse a contar y todas las cuentas me salieron mal: 2 y 2 son 4, 4 y 2 son 6, 6 y 2 son 8 y 8 16"
¿Qué cuenta le salió mal? Después quieren que nos vaya bien en matemáticas.
Reivindiquemos canciones como "mi novio es un gato educado, que habla inglés e italiano, que toca el violín con la cola, con las manos toca el piano [...] no puedo mamita ha salido, ha ido a comprarme un vestido, mejor nos vemos mañana, yo te espero en mi ventana" Al menos resalta los valores de la educación y la obediencia a los padres